ORIGEN DE

joya

El español toma la palabra del francés antiguo “joie” y éste del latín “jocus” (juego, diversión).

Si se piensa que en la antigüedad el empleo de las joyas y de las piedras preciosas, así como su empleo como amuletos en las artes adivinatorias estaba bastante arraigado y que esto tenía un sentido lúdico y placentero, encontraremos la razón del nombre.

En la antigüedad su uso como adorno estaba muy extendido, Sirva como ejemplo la cita del libro del Éxodo, capítulo 32, donde se da cuenta del becerro de oro confeccionado a base de fundir anillos, pendientes, collares y pulseras de las mujeres hebreas.

El uso de joyas fue propio tanto hombres como mujeres. Sólo hay dos civilizaciones que discrepan: los griegos lo prohibieron a los varones y los indios a las mujeres.

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