domingo, 16 de febrero de 2020


DESEMPOLVANDO

“Yo, señor, soy de Segovia. Mi padre se llamó Clemente, natural del mismo pueblo; Dios le tenga en el cielo. Fue, tal como todos dicen, de oficio barbero; aunque eren tan altos sus pensamientos, que se corría le llamasen así, diciendo que él era tundidor de mejillas y sastre de barbas. Dicen que era de muy buena cepa, y, según él bebía, es cosa para creer. Estuvo casado con Aldonza saturno de Rebollo, hija de Octavio de Rebollo Codillo y nieta de Lépido Ziuraconte…”

…………………

“…Yo, que vi que duraba mucho este negocio, y más la fortuna en perseguirnos –no de escarmentado, que no soy tan cuerdo, sino de cansado, como obstinado pecador-, determiné, consultándolo primero con la Grajales, de pasarme a Indias con ella, a ver si mudando mundo y tierra mejoraría mi suerte. Y fueme peor, pues nunca mejora su estado quien muda solamente de lugar y no de vida y costumbres.”
 Resultado de imagen de El buscón
Principio y fin de Vida del Buscón de Francisco de Quevedo
El Buscón es don Pablos “príncipe de la vida buscona”. Ingenia toda suerte de mentiras y artificios para sobrevivir. Criado de un estudiante va al pupilaje de Cabra, famoso por las hambres que hacía sufrir a sus pupilos. Les daba comidas “eternas” (sin principio ni fin).
Alguien ha definido al “Buscón” como “la más tétrica y pesimista de nuestras novelas picarescas”.
Resultado de imagen de El buscón

No hay comentarios:

Publicar un comentario