Las Ideas y Los Tiempos

Antigono I Monoftalmos (382  - 301 a. C.)

Antígono I el Tuerto fue un general y sátrapa macedonio, a las órdenes de Filipo II y Alejandro III,

Acompañó a Alejandro en la guerra contra Persia y administró Frigia durante diez años. A la muerte de Alejandro Magno, se hizo con casi todo el imperio y todas las tierras anteriormente conquistadas. Fundó la ciudad de Antígona, conocida como Nicea y derrotó uno por uno a sus rivales, llegando a reunir en el año 306 a. C. un ejército de ochenta mil infantes, ocho mil jinetes y ochenta y tres elefantes. Todos los demás generales se unieron contra él, presentándole batalla en Ipso en el año 301 a. C. en Frigia, muriendo en la contienda.

Se casó con la noble Estratónide y tuvo dos hijos: Demetrio, futuro rey de Macedona y Filipo que le acompañó en las campañas militares. Le apodaron El Tuerto, porque había perdido un ojo en una batalla. Se dice que condenó a muerte al sofista Teócrito por compararlo con un cíclope.

Primero fue compañero de Filipo II. Cuando falleció Filipo II formó parte del séquito de Alejandro Magno. Siendo ‘estrategos’ del contingente de aliados griegos. En el 333 a. C. Alejandro dejó a Antígono el gobierno de Frigia, cuya acrópolis estaba dominada por el sátrapa Atidies con una guarnición de mil carios y cien mercenarios griegos, Antígono, al mando de mil quinientos mercenarios griegos, la asedió y los asediados acabaron rindiéndose por hambre y Antígono los sumó a sus filas.

A la satrapía  de Frigia sumó más tarde las de Licia, Panfilia y Licaonia. Dominó la mayor parte de Asia Menor, siendo durante quince años la figura fundamental del Orente helenístico. En el 315 a. C. entró en Babilona, haciéndose con casi todos los territorios. Entonces Seleuco, refugiado en Egipto formó una liga contra él junto con Lisímaco y Casandro, regente de Macedonia. Le presentaron un  ultimatum en el que le exigían que devolviese las provincias a los sátrapas que había destituido. Antígono proclamó su deseo de devolver la libertad a las ciudades griegas en la proclama de Tiro, con el fin de debilitar la coalición.  Abandonó sin embargo el plan inicial y resolvió llevar la guerra a Asia Menor.

Después de cuatro años de guerra entre los diádocos o generales, se hacía necesario pactar una tregua. Esta llegó en el 311 a. C. Se pactó que cada diádoco se quedara los territorios que dominaba en ese momento y que Antígono quedara  como 0estrategos de Asia’. No duró mucho la paz. Seleuco venció a Antígono en la guerra de Babilonia.

Después de una gran victoria naval de Salamina, se proclamó rey (basileos), continuando con el sueño de confirmarse como el sucesor de Alejandro Magno. Los demás diádocos reaccionaron proclamándose también reyes. La consecuencia fue la desintegración legal del imperio y el surgimiento  oficial de los reinos helenísticos.

Los rivales de Antígono volvieron a coaligarse contra Antígono, dando lugar a la ‘guerra de los cuatro años’. Antígono a pesar de tener ya ochenta años, marchó contra la coalición con los ejércitos que había reunido en Ipsos. Fue vencido y muerto por una jabalina.

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