“Mandar a alguien al huerto del
francés”
Es un dicho popular. Se debe a las fechorías llevadas a cabo por José
Muñoz Lopera y Juan Aldije “el francés”. Hasta seis cadáveres de otras tantas
personas fueron hallados en el llamado “huerto del francés” (de Juan Aldije) en
Peñaflor, provincia de Córdoba.
Resulta que Muñoz López escogía a la víctima propicia entre los
jugadores de cartas y le convencía a que acudiera a Peñaflor a la propiedad de
“un francés millonario” que tenía mucho dinero, que sabía poco del juego y a
quien podría “desplumar” con facilidad. La víctima acudía y, una vez allí,
Muñoz Lopera y Juan Aldije mataban al visitante, le robaban y lo enterraban en
el huerto.
Esta frase con el tiempo, ha quedado en “llevar al huerto” simplemente
y se ha teñido de un marcado sentido erótico.
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