MADRUGUEIRO, de Emilia Pardo Bazán
La condesa doña Emilia Pardo Bazán (La Coruña 1851 – 1921) nos presenta al hombre en su más primitiva humanidad sometida al instinto. Su narrativa se incluye dentro del naturalismo moderado y está llena de colorido, plasticidad y una energía audaz y viril.
En
MADRUGUEIRO, se llamaba de este modo en Baizás al cohetero, por su viveza de
genio y la precipitación en su arriesgado oficio. Se llamaba Manuel y tenía una
hijastra, llamada Micaela, lunática y con fama de bruja y zahorí. Afirmaba la
moza que moríría rica y bañada en oro, pues había de encontrar un tesoro bajo la
corteza de la tierra, en el hueco de las paredes o so las vigas carcomidas de
algún antiguo edificio…
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