Va de ranas: cuatro de Esopo

Hay quien encuentra muy desproporcionado el croar  de la primera.

La segunda decía poder remediar a los demás lo que a sí misma no podía.

De las otras dos, una era impulsiva y prudente la otra.

La rana gritona y el león

Oyó una vez un león el croar de una rana y se vovió hacia donde venía el sonido, pensando que era de un animal muy importante.

Esperó y observó con atención un tiempo, y cuando vio a la rana que salía del pantano, se le acercó y la aplastó diciendo:

-¡Tú, tan pequeña y lanzando esos tremendos gritos!

La rana que decía ser médico y la zorra

Gritaba un día una rana desde su pantano a los demás animales.

-Soy médico y conozco muy bien todos los remedios para todos los males!

La oyó una zorra y le reclamó:

-¿Cómo te atreves a anunciar ayudar a los demás, cuando tú misma cojeas y no te sabes curar?

Las ranas y el pantano seco

Vivían dos ranas en un bello pantano, pero llegó el verano y se secó, por lo cual lo abandonaron para buscar otra agua. Hallaron en su camino un profundo pozo lleno de agua, y al verlo, dijo una rana a la otra:

-Amiga, bajemos las dos a este pozo

-Pero, y si también se seca el agua de este pozo –repuso la compañera- ¿Cómo crees que subiremos entonces?

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