Muerte del Piyayo
Ven acá ‘remediaora’
y remédiame mis males
que si tú no los remedias
ya no los remedia nadie,
ven acá ‘remediaora’
y remédiame mis males.
‘Mare’, se ha muerto el
Piyayo
aquel gitano reviejo
de pelo blanco y rizao
como vellón de cordero.
Aquel calé retostao
por los soles y el viento
que pa mantene a su genta
no daba descanso al
cuerpo.
Aquel que con la sonanta
ocultaba sufrimiento
cantando por bulerías
mientras vivía muriendo.
Porque una gitana guapa
que era de su alma espejo,
sangre de su misma sangre
se marchó lejos,,, mu
lejos.
¡Ay, la chavala cañí!
¡cuánto daño hizo al
agûelo!
¡Mare, se ha muerto el
Piyayo!
¿Quién amparará a los nietos?
Por él redoblan los
bronces
y dicen con sus lamentos
que fue una pena mu jonda
la que se llevó al
agüelo,
y cuando lanzan sus
quejas
con voz profunda los
vientos
parece que estremecío
dice a la mocita el
viejo:
Si oyes doblar las
campanas,
no preguntes quién se ha
muerto
porque a ti te lo dirá
tu propio remordimiento,
si oyes doblar las
campanas,
no preguntes quién se ha muerto.
Juanito Valderrama