Mercedes Sirvén Pérez (Bucaramanga, 1872 – La Habana. 1948)
Fue una militar cubana, la única mujer que alcanzó el grado
de comandante en el Ejército Libertador. Doctora en Farmacia, también fue la única
farmacéutica en las guerras de independencia.
En el año 1896 Mercedes se incorporó junto con su hermano
Faustino que era médico y su cuñada Consuelo al Ejército Libertador en la Holguín.
Allí fundó la botica llamada ‘La Revolucionaria’ que fue el centro abastecedor
de medicamentos de todos los hospitales de la región. El jefe de Sanidad Militar
otorgó a Mercedes, en reconocimiento, el grado de capitana del Cuerpo de Seguridad
del Ejército Libertador. Desde la Habana, otro hermano de Mercedes, Ricardo, proveía
de medicamentos a la ‘Revolucionaria’, sorteando la vigilancia del ejército español.
Mercedes, al acabarse la ‘quinina’ que se utilizaba contra el paludismo de los
combatientes y de los campesinos, fue capaz de obtener unas píldoras a base de un
extracto de hierbas silvestres, que conseguían el mismo efecto que la quinina.
Mercedes se desplazaba de un centro hospitalario a otro, sola, sin más compañía
que una mula y un fusil, sin miedo, a pesar del peligro que eso entrañaba. Un
año después fue ascendida al grado de comandante. Murió en la Habana a le edad
de 76 años.
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