Las Ideas y Los Tiempos

Los sefardíes

Se llama así a los judíos y descendientes de los judíos que vivieron en España hasta su expulsión por Los Reyes Católicos en el 1492. En la actualidad son unos dos millones los que integran esta comunidad y están dispersos por prácticamente todo el mundo. Todos ellos, sin embargo, permanecen ligados a la cultura hispánica. La palabra  ‘sefardí’ proviene de ‘Sefarad’ término con el que en las fuentes hebreas se designaba a la península ibérica.

Se tiene constancia de la presencia de judíos en tierra española desde tiempos remotos. Se incrementó su presencia durante las guerras púnicas (218 – 202 a.C.) En la época visigótica con Recaredo se inició una dura persecución. Con la llegada de los árabes (711) los judíos se vieron liberaos de la persecución de los visigodos y la presencia de judíos en España aumentó. La comunidad más grande de judíos y la más organizada fue la andalusí. Numerosos judíos provenientes de Europa y de los dominios árabes se trasladaron a Al-Ándalus, adoptaron el idioma árabe, ocuparon puestos de gobierno o se dedicaron a actividades comerciales y financieras. Destacaron en variedad de campos como medicina, astronomía, matemáticas, filosofía y estudio religioso.

Después de la expulsión en el año 1492, se fueron instalando en Portugal, en el norte te África. Inglaterra, Flandes y a los territorios del Imperio Otomano y de Oriente próximo. Los judíos que se establecieron en los distintas poblaciones del Imperio Otomano y del Oriente próximo continuaron hablando el castellano durante cinco siglos, conocido como el ‘judeoespañol’.

Con la caída del imperio otomano, la mayoría de los judíos sefardíes emigraron a Francia y Estados Unidos. Muchas ‘juderías’, sin embargo permanecieron en Estambul, Esmirna, Yugoslavia y Bulgaria. Durante la Segunda Guerra Mundial, descendió la comunidad sefardí debido sobre todo al llamado ‘Holocausto’. La mayoría de judíos sefardíes se dispersó por el mundo, sobre todo por los países americanos. Durante la República en España los gobiernos se mostraron favorables a restituir la nacionalidad española a los sefardíes descendientes de los que fueron expulsados, pero no pasó de una propuesta que no se llevó a cabo.

En la dictadura del General Franco ,debido a la relación estrecha que se tenía con Hitler, no se concedieron visados ni pasaportes a los judíos que huían del holocausto nazi. Sin embargo algunos diplomáticos españoles acogieron  a judíos sefardíes en las embajadas de ciudades como París, Atenas, Berlín, Bulgaria y Hungría, en contra de la voluntad del dictador.

En la actualidad, la comunidad sefardí es  numerosa en el Estado de Israel y su partido religioso ‘Shas’ es una importante fuerza política. En España está en proceso avanzado la propuesta de conceder la nacionalidad española a los sefardíes descendientes de los expulsados por los Reyes Católicos.